En plena crisis y en plena campaña electoral, se siguen oyendo bobadas referidas al CO2.
Las centrales térmicas de carbón siguen estando en el ojo de mira... nergía limpia (si se extrae previamente el azufre que pueda contener el carbón), barata, segura y fácil de generar. Pues nada, que no hay manera.
Nuestros gobernantes y nuestros cacareantes ecologistas (así se autodefinden) siguen haciendo brindis al sol y anunciando que el futuro es renovable. Navarra presume de poder abastecerse en una década gracias a los aerogeneradores (incluso hablan de exportar electricidad excedentes).
La verdad, llenar Navarra de aerogeneradores me parece una barbaridad, ya que todos ellos podrían ser sustituidas perfectamente por 2 centrales térmicas de tamañano pequeño-medio.
Pero bueno, eslo que toca, llenar nuestros montes y bosques de chatarra para evitar al inevitable (e inofensivo) CO2 de la atmósfera. El ser humano es estúpido, siempre.
Ahora tenemos otro debate, el gas procedente de los esquistos (pizarras) que se acumula en el subsuelo y que podría servir para generar electricidad a kaskoporro.
Europ cuenta con 156 billones de pies cúbicos de este gas, que serviría para producir electricidad durante 90 años. Francia ya se ha negado a utilizar este recurso.
¿Por qué? Porque pese a Fukushima, Europa apuesta por la energía nuclera y por llenar nuestros entornos de chatarra en forma de aerogeneradores.
Mientras tanto la factura eléctrica sigue subiendo y nos piden apretarnos el cinturón por todas partes... menos por ahi.
Triste.
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